Desde su adolescencia, siempre fue consciente de la forma de su nariz. Tenía un leve caballete y una punta caída que le incomodaba al verse en fotos o videos. Sin embargo, más allá de la apariencia, también tenía problemas para respirar debido a un tabique desviado. Después de años de indecisión, finalmente optó por someterme a una rinoplastia funcional y estética.

El Proceso de Decisión

Antes de tomar la decisión, investigó exhaustivamente sobre el procedimiento, los riesgos y los resultados esperados. Consultó con la clínica y el doctor, quien le explicó que su cirugía no solo mejoraría la estética, sino que también corregiría la desviación septal para mejorar su respiración. Le mostró simulaciones de los posibles resultados y resolvió todas sus dudas.

El Día de la Cirugía

El procedimiento duró aproximadamente dos horas bajo anestesia general. Al despertar, sintió un leve mareo, su nariz estaba cubierta con una férula y con unas gasas en los orificios nasales. No sentía dolor intenso, pero sí una ligera presión y congestión, como cuando se tiene una gripe fuerte.

La Recuperación

Los primeros días fueron los más incómodos. Tenía hinchazón, moretones alrededor de los ojos y la dificultad de respirar por la boca algo completamente normal pero que a ella le producía una sensación de malestar.

Siguió todas las indicaciones del médico:

  • Aplicación de compresas frías para reducir la hinchazón
  • Evitar esfuerzos físicos y exposición al sol
  • Dormir con la cabeza elevada para mejorar la circulación

A la semana, le retiraron la férula y, aunque su nariz seguía inflamada y con algún moreton, ya podía notar la diferencia. En un mes, la hinchazón había bajado significativamente, y después de seis meses, vio el resultado final.

Resultados y Reflexión

Su nariz luce natural y armoniza con su rostro. Lo mejor de todo es que la respiración mejoró considerablemente. Esta experiencia le enseñó que la rinoplastia no es solo un cambio estético, sino que puede tener un impacto positivo en la calidad de vida.

Si estás considerando una rinoplastia, nuestro consejo es investigar bien, elegir una clínica con un cirujano certificado y tener expectativas realistas. Cada proceso es único, pero en su caso, fue una de las mejores decisiones que tomó.

Fuente: Testimonio personal